
Aún con el recuerdo del último racimo de uva recogido en nuestros viñedos, nos despedimos de esta vendimia 2023. Una vendimia que empezamos el 16 de agosto y finalizamos el 1 de setiembre; y a la que Pepe Raventós ha calificado como “la vendimia del sufrimiento”.
Y es que la sequía ha puesto a prueba a nuestras cepas, mermando su producción de uva y obligando a nuestro equipo a vendimiarlas de madrugada para evitar las horas de máximo calor.
Pero, a pesar de las dificultades, esta vendimia nos deja una uva muy sana y de excelente calidad, tanto en nuestra finca como en las de los viticultores de la Conca del Riu Anoia con los que trabajamos y a los que, un año más, hemos querido valorar su trabajo ofreciendo el mejor precio por su uva.
El final de la vendimia trae unos días de cierta calma en los viñedos, que ya esperan el nuevo año vinícola. Mientras, la bodega trabaja sin pausa con las fermentaciones del mosto y las vinificaciones. Las cepas ya han hecho su labor. Ahora es momento de acompañar el vino y ver su evolución.